SHABATH 01.03.2014-
Día 29 del Mes 12 Hebreo del 5774
SHALOM BESHEM
YESHUAH HAMASHIAJ [SÁBADO DE PAZ, EN EL NOMBRE DE JESUCRISTO], AMÉN
LA
RESTAURACIÓN
DE ISRAEL Y
EL REGRESO DE YESHUAH HAMASHIAJ [JESUCRISTO]
PARASHATH [PORCIÓN DE LA TORÁH] PEKUDEI [“CUENTAS DE”]-SHEMOTH/ÉXODO 38:21-40:38
Confección del Joshen [Pectoral del Juicio]
Shemoth/Éxodo 39:8
Hizo también el Joshen Mishpat [Pectoral del Juicio], que sea obra de tejedor
experto-lo hizo tal como el trabajo del efod (delantal) de (hilo de) oro, lana
turquesa, lana púrpura, lana roja e hilo de lino. (Es de destacar que la
prohibición de de shatnez mezcla de fibras de lana y de lino en un mismo
tejido- no rige para las prendas sacerdotales). 9 El Joshen era cuadrado y
estaba plegado (al medio por la parte inferior). Su longitud era de un zeret y
su ancho era de un zeret estando plegado. (Zeret, palmo, aproximadamente medio
codo- un codo es aproximadamente 48-60 cm). La Primera fila: Odem
(cornalina o rubí). Pitdá (esmeralda) y Bareket (topacio). En la segunda fila: Nofet
(rubí). Sapir (zafiro) e Yahalom (diamante). 12 En la tercera fila: Leshem
(especie de zafiro negro a azulado), Shevo (especie de cuarzo gris) y Ajlamá
(amatista). 13 En la cuarta hilera: Tarshish (crisólito), Shoham (piedra negra)
e Iashfé (jaspe). (Las piedras) estaban insertadas en engastes de oro. 14 las
piedras eran 12, tantas como los nombres de los hijos de Israel. Cada una tenía
grabado en forma de sello el nombre de las 12 tribus.
La Restauración del Reino de Israel.
Si vemos en el
Libro Profético del Apocalipsis, aparecen las 12 tribus de Israel, y las
piedras preciosas de la nueva Jerusalém son las mismas que aparecen en el
Pectoral del Sumo Sacerdote = Kohen
HaGadol. Los 144000 no deben interpretarse como un número exacto, sino que es
una representación de que cada una de las tribus de Israel serán restauradas.
144000 = 12 x 12000
Apocalipsis
7:1 Después de esto
vi a cuatro ángeles en pie sobre los cuatro ángulos de la tierra, que detenían
los cuatro vientos de la tierra, para que no soplase viento alguno sobre la
tierra, ni sobre el mar, ni sobre ningún árbol.
7:2 Vi también a otro ángel que subía de donde sale el sol, y tenía el sello del Elohim vivo; y clamó a gran voz a los cuatro ángeles, a quienes se les había dado el poder de hacer daño a la tierra y al mar,
7:3 diciendo: No hagáis daño a la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que hayamos sellado en sus frentes a los siervos de nuestro Elohim.
7:4 Y oí el número de los sellados: ciento cuarenta y cuatro mil sellados de todas las tribus de los hijos de Israel.
7:5 De la tribu de Yahudáh [Judá], doce mil sellados. De la tribu de Reubén [Rubén], doce mil sellados. De la tribu de Gad, doce mil sellados.
7:6 De la tribu de Asher, doce mil sellados. De la tribu de Neftalí, doce mil sellados. De la tribu de Manashé, doce mil sellados.
7:7 De la tribu de Simeón, doce mil sellados. De la tribu de Leví, doce mil sellados. De la tribu de Ishajar, doce mil sellados.
7:8 De la tribu de Zebulún, doce mil sellados. De la tribu de Yosef, doce mil sellados. De la tribu de Benjamín, doce mil sellados.
7:9 Después de esto miré, y he aquí una gran multitud, la cual nadie podía contar, de todas naciones y tribus y pueblos y lenguas, que estaban delante del trono y en la presencia del Cordero, vestidos de ropas blancas, y con palmas en las manos;
7:10 y clamaban a gran voz, diciendo: La salvación pertenece a nuestro Elohim que está sentado en el trono, y al Cordero.
7:11 Y todos los ángeles estaban en pie alrededor del trono, y de los ancianos y de los cuatro seres vivientes; y se postraron sobre sus rostros delante del trono, y adoraron a Yahwéh,
7:12 diciendo: Amén. La bendición y la gloria y la sabiduría y la acción de gracias y la honra y el poder y la fortaleza, sean a nuestro Elohim por los siglos de los siglos. Amén.
7:13 Entonces uno de los ancianos habló, diciéndome: Estos que están vestidos de ropas blancas, ¿quiénes son, y de dónde han venido?
7:14 Yo le dije: Señor, tú lo sabes. Y él me dijo: Estos son los que han salido de la gran tribulación [Matityahu/Mateo 24:21], y han lavado sus ropas, y las han emblanquecido en la sangre del Cordero.
7:15 Por esto están delante del trono de Yahwéh, y le sirven día y noche en su templo; y el que está sentado sobre el trono extenderá su tabernáculo sobre ellos.
7:16 Ya no tendrán hambre ni sed, y el sol no caerá más sobre ellos, ni calor alguno;
7:17 porque el Cordero que está en medio del trono los pastoreará, y los guiará a fuentes de aguas de vida; y Yahwéh enjugará toda lágrima de los ojos de ellos.
7:2 Vi también a otro ángel que subía de donde sale el sol, y tenía el sello del Elohim vivo; y clamó a gran voz a los cuatro ángeles, a quienes se les había dado el poder de hacer daño a la tierra y al mar,
7:3 diciendo: No hagáis daño a la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que hayamos sellado en sus frentes a los siervos de nuestro Elohim.
7:4 Y oí el número de los sellados: ciento cuarenta y cuatro mil sellados de todas las tribus de los hijos de Israel.
7:5 De la tribu de Yahudáh [Judá], doce mil sellados. De la tribu de Reubén [Rubén], doce mil sellados. De la tribu de Gad, doce mil sellados.
7:6 De la tribu de Asher, doce mil sellados. De la tribu de Neftalí, doce mil sellados. De la tribu de Manashé, doce mil sellados.
7:7 De la tribu de Simeón, doce mil sellados. De la tribu de Leví, doce mil sellados. De la tribu de Ishajar, doce mil sellados.
7:8 De la tribu de Zebulún, doce mil sellados. De la tribu de Yosef, doce mil sellados. De la tribu de Benjamín, doce mil sellados.
7:9 Después de esto miré, y he aquí una gran multitud, la cual nadie podía contar, de todas naciones y tribus y pueblos y lenguas, que estaban delante del trono y en la presencia del Cordero, vestidos de ropas blancas, y con palmas en las manos;
7:10 y clamaban a gran voz, diciendo: La salvación pertenece a nuestro Elohim que está sentado en el trono, y al Cordero.
7:11 Y todos los ángeles estaban en pie alrededor del trono, y de los ancianos y de los cuatro seres vivientes; y se postraron sobre sus rostros delante del trono, y adoraron a Yahwéh,
7:12 diciendo: Amén. La bendición y la gloria y la sabiduría y la acción de gracias y la honra y el poder y la fortaleza, sean a nuestro Elohim por los siglos de los siglos. Amén.
7:13 Entonces uno de los ancianos habló, diciéndome: Estos que están vestidos de ropas blancas, ¿quiénes son, y de dónde han venido?
7:14 Yo le dije: Señor, tú lo sabes. Y él me dijo: Estos son los que han salido de la gran tribulación [Matityahu/Mateo 24:21], y han lavado sus ropas, y las han emblanquecido en la sangre del Cordero.
7:15 Por esto están delante del trono de Yahwéh, y le sirven día y noche en su templo; y el que está sentado sobre el trono extenderá su tabernáculo sobre ellos.
7:16 Ya no tendrán hambre ni sed, y el sol no caerá más sobre ellos, ni calor alguno;
7:17 porque el Cordero que está en medio del trono los pastoreará, y los guiará a fuentes de aguas de vida; y Yahwéh enjugará toda lágrima de los ojos de ellos.
21:9 Vino entonces
a mí uno de los siete ángeles que tenían las siete copas llenas de las siete
plagas postreras, y habló conmigo, diciendo: Ven acá, yo te mostraré la
desposada, la esposa del Cordero.
21:10 Y me llevó en el Espíritu a un monte grande y alto, y me mostró la gran ciudad santa de Jerusalém, que descendía del cielo, de Yahwéh,
21:11 teniendo la gloria de Yahwéh. Y su fulgor era semejante al de una piedra preciosísima, como piedra de jaspe, diáfana como el cristal.
21:12 Tenía un muro grande y alto con doce puertas; y en las puertas, doce ángeles, y nombres inscritos, que son los de las doce tribus de los hijos de Israel;
21:13 al oriente tres puertas; al norte tres puertas; al sur tres puertas; al occidente tres puertas.
21:14 Y el muro de la ciudad tenía doce cimientos, y sobre ellos los doce nombres de los doce apóstoles del Cordero.
21:15 El que hablaba conmigo tenía una caña de medir, de oro, para medir la ciudad, sus puertas y su muro.
21:16 La ciudad se halla establecida en cuadro, y su longitud es igual a su anchura; y él midió la ciudad con la caña, doce mil estadios; la longitud, la altura y la anchura de ella son iguales.
21:17 Y midió su muro, ciento cuarenta y cuatro codos, de medida de hombre, la cual es de ángel.
21:18 El material de su muro era de jaspe; pero la ciudad era de oro puro, semejante al vidrio limpio;
21:19 y los cimientos del muro de la ciudad estaban adornados con toda piedra preciosa. El primer cimiento era jaspe; el segundo, zafiro; el tercero, ágata; el cuarto, esmeralda;
21:20 el quinto, ónice; el sexto, cornalina; el séptimo, crisólito; el octavo, berilo; el noveno, topacio; el décimo, crisopraso; el undécimo, jacinto; el duodécimo, amatista.
21:21 Las doce puertas eran doce perlas; cada una de las puertas era una perla. Y la calle de la ciudad era de oro puro, transparente como vidrio.
21:22 Y no vi en ella templo; porque Yahwéh Elohim Shaday [el Señor Dios Todopoderoso] es el templo de ella, y el Cordero.
21:23 La ciudad no tiene necesidad de sol ni de luna que brillen en ella; porque la gloria de Yahwéh la ilumina, y el Cordero es su lumbrera.
21:24 Y las naciones que hubieren sido salvas andarán a la luz de ella; y los reyes de la tierra traerán su gloria y honor a ella.
21:25 Sus puertas nunca serán cerradas de día, pues allí no habrá noche.
21:26 Y llevarán la gloria y la honra de las naciones a ella.
21:27 No entrará en ella ninguna cosa inmunda, o que hace abominación y mentira, sino solamente los que están inscriptos en el libro de la vida del Cordero.
21:10 Y me llevó en el Espíritu a un monte grande y alto, y me mostró la gran ciudad santa de Jerusalém, que descendía del cielo, de Yahwéh,
21:11 teniendo la gloria de Yahwéh. Y su fulgor era semejante al de una piedra preciosísima, como piedra de jaspe, diáfana como el cristal.
21:12 Tenía un muro grande y alto con doce puertas; y en las puertas, doce ángeles, y nombres inscritos, que son los de las doce tribus de los hijos de Israel;
21:13 al oriente tres puertas; al norte tres puertas; al sur tres puertas; al occidente tres puertas.
21:14 Y el muro de la ciudad tenía doce cimientos, y sobre ellos los doce nombres de los doce apóstoles del Cordero.
21:15 El que hablaba conmigo tenía una caña de medir, de oro, para medir la ciudad, sus puertas y su muro.
21:16 La ciudad se halla establecida en cuadro, y su longitud es igual a su anchura; y él midió la ciudad con la caña, doce mil estadios; la longitud, la altura y la anchura de ella son iguales.
21:17 Y midió su muro, ciento cuarenta y cuatro codos, de medida de hombre, la cual es de ángel.
21:18 El material de su muro era de jaspe; pero la ciudad era de oro puro, semejante al vidrio limpio;
21:19 y los cimientos del muro de la ciudad estaban adornados con toda piedra preciosa. El primer cimiento era jaspe; el segundo, zafiro; el tercero, ágata; el cuarto, esmeralda;
21:20 el quinto, ónice; el sexto, cornalina; el séptimo, crisólito; el octavo, berilo; el noveno, topacio; el décimo, crisopraso; el undécimo, jacinto; el duodécimo, amatista.
21:21 Las doce puertas eran doce perlas; cada una de las puertas era una perla. Y la calle de la ciudad era de oro puro, transparente como vidrio.
21:22 Y no vi en ella templo; porque Yahwéh Elohim Shaday [el Señor Dios Todopoderoso] es el templo de ella, y el Cordero.
21:23 La ciudad no tiene necesidad de sol ni de luna que brillen en ella; porque la gloria de Yahwéh la ilumina, y el Cordero es su lumbrera.
21:24 Y las naciones que hubieren sido salvas andarán a la luz de ella; y los reyes de la tierra traerán su gloria y honor a ella.
21:25 Sus puertas nunca serán cerradas de día, pues allí no habrá noche.
21:26 Y llevarán la gloria y la honra de las naciones a ella.
21:27 No entrará en ella ninguna cosa inmunda, o que hace abominación y mentira, sino solamente los que están inscriptos en el libro de la vida del Cordero.
PIENSEN QUERIDOS
CRISTIANOS QUE LEEN ESTO, ¿PORQUÉ MUCHOS TEOLOGOS SEAN CATÓLICOS O PROTESTANTES
ENSEÑAN QUE EL PUEBLO JUDÍO FUE DESECHADO?
ESTA MUY CLARO QUE
YAHWÉH ELOHIM [JEHOVÁ DIOS] MISMO EN LA REVELACIÓN PROFÉTICA
CONFIRMA QUE EL PUEBLO JUDÍO NO HA SIDO DESECHADO, NI LO SERÁ JAMÁS.
AMADOS CRISTIANOS,
NO SE DEJEN ENGAÑAR, EL PUEBLO JUDÍO JAMÁS HA SIDO DESECHADO. EL RELOJ PROFÉTICO
DE YAHWÉH ELOHIM ES EL ESTADO DE ISRAEL. CRISTIANOS QUERIDOS, HUYAN DEL FALSO
EVANGELIO DE LA
PROSPERIDAD, EL REGRESO DE YESHUAH HAMASHIAJ A BUSCAR A SU
PUEBLO ESTA MUY CERCANO.
APOCALIPSIS
22:20 El que da
testimonio de estas cosas dice: Ciertamente vengo en breve. Amén; sí, ven, Adón
Yeshuah [Señor Jesús].
22:21 La gracia de nuestro Adón Yeshuah HaMashiaj [Señor Jesucristo] sea con todos vosotros. Amén.
22:21 La gracia de nuestro Adón Yeshuah HaMashiaj [Señor Jesucristo] sea con todos vosotros. Amén.
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